Productos de calidad gourmet con un toque renacentista.

La Catedral de Valencia, un monumento que data del siglo XIII, no solo es un símbolo de espiritualidad y arquitectura impresionante, sino también un testigo de la herencia histórica que ha perdurado a lo largo de los siglos.

En este artículo, exploraremos la conexión entre la catedral y una línea de productos excepcionales: Herencia de la Catedral, que rinde homenaje a la tradición y al esplendor renacentista que una vez adornó sus paredes.

La Herencia de la Catedral.

Herencia de la Catedral es una línea de productos compuesta por vino, aceite y cava de calidad artesanal. La inspiración detrás de estos productos proviene de la rica historia de la Catedral de Valencia y de la tradición de la «Mesa común» o «Mensa episcopi», donde se elaboraban los alimentos para los clérigos, los trabajadores del templo y las personas necesitadas que acudían en busca de ayuda.

Herencia de la Catedral

Botella de vino «Herencia de la Catedral». Ver caso de estudio.

Los Ingredientes de la tradición.

La materia prima para estos productos llegaba de diversos lugares cercanos a la catedral. El trigo venía de lugares próximos como Alaquás o Campanar, el arroz de las tierras alrededor de l’Albufera, el vino de las comarcas de los Serranos, Requena y Utiel, y el aceite de oliva de la serranía de Chulilla y Segorbe. Estos elementos básicos, pan, vino y aceite, eran esenciales para varios de los sacramentos de la Iglesia y formaban parte de la riqueza histórica de la catedral.

Herencia de la Catedral es más que una línea de productos, es un tributo a la rica historia de la Catedral de Valencia y al esplendor del Renacimiento.

El legado perdura.

Aunque el curso de la historia acabó con la propiedad de estas tierras, la herencia de aquellos tiempos sigue viva en nuestros días. Herencia de la Catedral busca preservar esa herencia al ofrecer productos elaborados con los mismos frutos de la tierra y el mismo cuidado artesanal que se practicaba siglos atrás.

Los frescos renacentistas de la Catedral. (© Cabildo Metropolitano de Valencia)

El proceso creativo

Para dar vida a esta línea de productos única, se mantuvo un diálogo constante con el cliente durante todo el proceso de desarrollo. Inspirados en los frescos renacentistas que una vez decoraron la catedral, la decisión de utilizar a los ángeles del Renacimiento del siglo XV como elemento principal en las etiquetas fue un enfoque colaborativo que permitió capturar la esencia de la tradición y la autenticidad.

Ángeles músicos.

La Catedral de Valencia, con su construcción gótica, sufrió un trágico incendio en 1462 que destruyó gran parte de su decoración. Sin embargo, la restauración de estas pinturas culminó en el año 2007. Los ángeles del Renacimiento del siglo XV que rodeaban la desaparecida clave con la imagen de la Asunción de la Virgen son un testimonio del esplendor artístico de la época.

Herencia de la Catedral

«Herencia de la Catedral» etiqueta de vino. Ver caso de estudio.

El diseño de las etiquetas.

Las etiquetas de Herencia de la Catedral transportan a los consumidores a la belleza de la Catedral de Valencia. Cada etiqueta presenta un fresco del siglo XV que muestra ángeles entonando con gracia sus melodías celestiales. Este diseño evoca la tradición y la autenticidad, otorgando a la marca un encanto único.

Herencia de la Catedral es más que una línea de productos, es un tributo a la rica historia de la Catedral de Valencia y al esplendor del Renacimiento. Cada botella de vino, aceite y cava celebra la tradición y la autenticidad, al tiempo que transporta a los consumidores a una época de belleza artística. Al elegir Herencia de la Catedral, los amantes de la historia y la calidad pueden disfrutar de productos excepcionales que rinden homenaje a un legado que perdura a lo largo de los siglos.

© Estudio Eurisco